Foto de Terinea
El fenómeno Facebook ha sido uno de los acontecimientos on-line del año, siguiendo los pasos del archifamoso MySpace, viene a demostrar que la web social está de moda.
Los ingresos de estos sitios se basan en ingresos por publicidad como base y algunos al modelo de suscripción mediante el uso de algunos servicios extra. La clave del éxito económico de estos sitios es la publicidad contextualizada, es decir, publicidad ajustada a mis gustos, localización geográfica… datos extraíbles de los perfiles que los usuarios introducen en dichos lugares.
Este tipo de publicidad ofrece ventajas obvias frente a la publicidad indiscriminada que ofrece por ejemplo la TV. Pero a pesar de todo no dejan de ser mensajes indeseados, a veces intrusivos y la mayoría de las veces ignorados y sensorialmente olvidados (artículo sobre el tema en Apogee).
¿Pero y si la publicidad on-line fuera más allá? El éxito de muchas de estas plataformas deriva de sus códigos abiertos, de sus API (Application Program Interface) que permiten el desarrollo de aplicaciones con y/o para dichas plataformas, Facebook es el claro ejemplo de éxito gracias a una estrategia abierta (ver Facebook como plataforma en Error500). Esta nueva característica de los medios on-line que posibilita esa cultura del remix que tanto venimos enfatizando desde este blog es la que debería ser utilizada para cambiar los paradigmas publicitarios que venimos considerando.
¿Por qué en vez de invadir el espacio de nuestros usuarios no les ofrecemos herramientas útiles? ¿Qué podemos ofrecer a nuestro usuario para hacer su vida más fácil en la red? Navegando podemos ver usuarios que introducen sus widgets del last.fm, su Twitter, sus fotos en Slide ¿No podría tu empresa hacer algo así? ¿Cómo podría tu producto adaptarse a una herramienta de este tipo? Y aquí podríamos no limitarnos a las redes sociales, también a la creación de widgets que ofrecieran interesantes funcionalidades relacionadas con nuestros productos a los usuarios de Windows Vista o Apple.
Tal vez muchos piensen que estas labores de desarrollo forman parte más del departamentos de tecnología que del de marketing o publicidad, pero el trabajo interdepartamental y la interconexión entre la publicidad y las nuevas tecnologías es cada vez más necesario y vital, la megaconocida sentencia Mcluhaniana “El medio es el mensaje†sigue siendo válida, y el medio actual es tremendamente tecnológico, si no colaboramos estrechamente con la tecnología, no conseguiremos transmitir el mensaje.
Los beneficios de este tipo de publicidad sobre el resto serían:
– Mejora de la imagen de marca. Puedes hacer mejores anuncios, hacer logos más bonitos, pero no hay nada como una verdadera acción por tu usuario-consumidor para que este te valore.
– La publicidad deja de ser intrusita a ser voluntaria. La publicidad deja de ser vista como un inconveniente para ser un servicio.
– La utilización de nuestros servicios nos proporcionará numerosos enlaces (cada usuario que los utilice nos estará ofreciendo un enlace), con la consecuente mejora en rankings de posicionamiento y visitas.